Una vez capturada regresa al padre de los ríos leoneses, con salpicón y todo. Ojito con la cámara en este tipo de fotos que si el pez es bueno te puede dejar la cámara para el servicio técnico... y lo digo por experiencia.
El agua que falta a los ríos gallegos no es ni medio normal, no ha llovido casi nada en todo el verano. Esperemos que cuando entre el Otoño se rompa la tónica.
Aquí tenéis a Fernando Comba capturando una trucha, menuda cara de felicidad. Si os fijáis podéis ver que el agua está casi completamente parada, pero Fernando es un especialista en este tipo de aguas quietas. Si lo veis por el río decidle que os explique como lo hace…